SANTO DOMINGO.- El presidente dominicano, Luis Abinader, manifestó este viernes (06.09.2024) su deseo de restablecer «en la medida de lo posible» las relaciones con Haití, que han estado tensas durante casi un año debido a la construcción de un canal por parte de Haití en el río Masacre o Dajabón, en la frontera entre ambos países.
Abinader señaló en una conferencia de prensa en la sede de la Presidencia dominicana, junto al secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, que su objetivo es normalizar las relaciones, pero siempre priorizando la seguridad de la República Dominicana.
Sin embargo, Abinader destacó que todo dependerá de cómo los haitianos puedan avanzar en la seguridad interna de su país, que enfrenta una crisis donde las bandas controlan gran parte de Puerto Príncipe y otras zonas.
Durante su reunión con Blinken, abordaron la crisis haitiana y la relación bilateral entre Haití y la República Dominicana.
En su declaración, Abinader subrayó que la crisis en Haití ha incrementado la presión migratoria hacia la República Dominicana, lo que afecta los servicios públicos y genera riesgos para la seguridad nacional.
Esta situación se refleja en el sistema educativo, donde el 6,5% de los estudiantes, aproximadamente 147,000, son haitianos. Abinader recordó que, el 14 de septiembre de 2023, ordenó el cierre de las fronteras por aire, mar y tierra con Haití en protesta por la construcción del canal, calificándolo de «insensato».
Además, Abinader mencionó que en los hospitales públicos, el 14% de los internamientos y el 34% de los partos son de inmigrantes haitianos indocumentados, algo que, según él, no se ve en ningún otro sistema de salud en el mundo.
Por su parte, Blinken recordó que la crisis en Haití, que a principios de 2024 dejó al país bajo el control de bandas armadas, tiene repercusiones en todo el continente.
Afirmó que «nuestros futuros están unidos; el de Haití, la República Dominicana y Estados Unidos», y agradeció a Abinader por su papel crucial en movilizar a la comunidad internacional. Blinken señaló que hay una creciente voluntad colectiva para tomar medidas efectivas en Haití y que, aunque aún quedan desafíos, se han logrado avances reales.