ECUADOR. – El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, presentó ante la Corte Constitucional una propuesta de reforma que busca permitir la instalación de bases militares extranjeras en el país, argumentando que es necesario para combatir el crimen transnacional.
Esta iniciativa, que aún debe pasar por un largo proceso, implicaría eliminar la prohibición explícita de bases o instalaciones militares extranjeras en Ecuador, establecida en la Constitución de 2008 durante el mandato de Rafael Correa.
Correa, en su momento, defendió esta prohibición como una medida para proteger la soberanía nacional, lo que llevó a la salida de militares estadounidenses de una base en la costa ecuatoriana. Noboa, sin embargo, justifica su propuesta afirmando que la ausencia de dichas bases ha dejado al país vulnerable, convirtiéndolo en un centro del narcotráfico y entregándolo a las mafias.
El proyecto también permitiría que personal extranjero ocupe instalaciones militares ecuatorianas existentes. Noboa criticó las decisiones de gobiernos anteriores que, según él, debilitaron al país frente a amenazas globales. Además, pidió a la Asamblea Nacional que reflexione sobre su postura ante esta iniciativa, advirtiendo que las amenazas actuales no respetan fronteras.
El expresidente Correa, por su parte, criticó duramente a Noboa, cuestionando su capacidad y ética, y sugirió que debería haber propuesto esta medida en la reciente consulta popular sobre seguridad. De aprobarse la reforma, el artículo 5 de la Constitución se modificaría para declarar únicamente que «Ecuador es un territorio de paz», eliminando la prohibición de bases militares extranjeras.
El proceso de aprobación podría tomar entre ocho y nueve meses, y deberá pasar por la Corte Constitucional, la Asamblea Nacional y, finalmente, un referendo para su ratificación. Dado que el mandato de Noboa concluye en mayo del próximo año, es incierto si la reforma podrá completarse antes de esa fecha. Noboa ya ha anunciado su intención de postularse a la reelección en las elecciones de 2025.
La retirada de los militares estadounidenses de la base de Manta en 2009 fue un tema controvertido, y con el aumento de la violencia desde 2021, algunos críticos han sugerido que la salida facilitó la expansión del narcotráfico en el país.