PERÚ.- Tribunal en Perú condenó el lunes al expresidente Alejandro Toledo a 20 años y seis meses de prisión por colusión y lavado de activos, al recibir sobornos de la constructora brasileña Odebrecht a cambio de adjudicar un tramo de la carretera que conecta Brasil con Perú.
La jueza Inés Rojas, quien leyó la sentencia durante más de cuatro horas, consideró a Toledo como el principal implicado y afirmó que se demostraron los elementos de culpabilidad en ambos delitos. Además, le impuso tres años de inhabilitación para ocupar cargos públicos, tal como solicitó la fiscalía.
Toledo es el segundo expresidente peruano condenado por corrupción, después de Alberto Fujimori, quien recibió varias sentencias en 2009 por delitos similares.
La fiscalía acusó a Toledo de recibir 35 millones de dólares de Odebrecht a cambio de otorgar a la constructora brasileña, señalada por casos análogos en varios países, un contrato para construir 650 kilómetros de la carretera Interoceánica. El costo inicial de este proyecto era de 507 millones de dólares, pero el país terminó pagando 1.255 millones.
La jueza Rojas comentó que Toledo, en su rol de presidente, debía actuar con imparcialidad y proteger los bienes del Estado, lo cual no cumplió. Durante la lectura, citó testimonios del exejecutivo de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, quien reveló que Toledo lo presionó tras dejar el cargo, pidiéndole el pago de manera contundente.
El juicio se llevó a cabo en 175 audiencias, con más de 100 testigos y una vasta cantidad de pruebas documentales que fundamentaron la decisión del tribunal. Toledo, que ha negado las acusaciones, está en prisión preventiva desde abril de 2023. Otros tres expresidentes peruanos están bajo investigación por casos relacionados con Odebrecht.
Toledo fue extraditado desde Estados Unidos en 2019 y actualmente se encuentra en una prisión para expresidentes. Durante la audiencia, pidió a los jueces que lo dejaran regresar a su hogar debido a problemas de salud, alegando que tenía cáncer y problemas cardíacos, pero la corte ordenó que regresara a su celda tras la sentencia.
El fiscal José Domingo Pérez expresó que la condena es «histórica» y un mensaje claro de que la corrupción será castigada, mientras que el abogado de Toledo anunció que apelarán la decisión. Además, otros expresidentes están siendo investigados por sus vínculos con Odebrecht, que cambió su nombre a Novonor en 2020.
Las investigaciones contra la clase política en Perú comenzaron después de que Odebrecht admitiera haber sobornado a funcionarios en varios países de la región, incluido Perú, para obtener contratos de infraestructura.
