
Pocas veces en la Fórmula 1 hay fichajes que mueven masas de gente, pero en el caso de Lewis Hamilton y Ferrari, la “locura” desatada por los tifosi no ha hecho más que ir en aumento. Desde el primer día que el heptacampeón del mundo pisó Maranello, ha habido muchas comparaciones con el debut de Michael Schumacher, quien marcó un antes y un después para la Scuderia.

El matrimonio perfecto
El británico se unió a Mercedes durante la temporada 2014, año en el que precisamente logró su segundo campeonato de pilotos. A partir de ahí, el resto ya es historia, siete mundiales de pilotos y ocho de constructores. Sin embargo, la situación había ido degradándose poco a poco, hasta que finalmente Lewis Hamilton tomara una decisión que cambiaría su vida para siempre.
Unirse a Ferrari y hacerles ganar de nuevo. Ese es el objetivo que tiene un piloto en una escudería que no sabe lo que es ganar un campeonato de constructores desde la temporada 2008, a pesar de haberse quedado cerca en 2024, y de pilotos, desde el año 2007. Por ello, Piero Ferrari, hijo del gran Enzo Ferrari, quiso describir cómo han sido los primeros días del heptacampeón con la Scuderia.
“Toda esa verdadera pasión me impactó, fue una demostración de amor”, decía.
“Tenía vínculos con Mercedes y nosotros con nuestros pilotos también. Entonces llegó el momento en que tanto Lewis como nosotros vimos la oportunidad de iniciar negociaciones”, prosiguió.
“Está sano, esta en buena forma tanto física como mentalmente y siete títulos mundiales significan que Lewis es un piloto con mucha experiencia en la categoría”, concluyó Piero Ferrari.
Es así como Piero Ferrari ha querido destacar el fichaje de Lewis Hamilton, que puede marcar un antes y un después para los de Maranello.