Si durante la noche debes levantarte una o dos veces para ir al baño, en sí mismo no es preocupante. Pero si debes levantarte cada 30 minutos, esa es una historia diferente. Si tienes cáncer de próstata, un tumor canceroso podría estar irritándote la vejiga o la uretra, lo que puede dar lugar al aumento de la cantidad de veces que orinas diariamente, sobre todo, a la noche.

Incontinencia urinaria

¿La vejiga te juega una mala pasada? Podría tratarse de cáncer de próstata. Esta es una de las causas más frecuentes de incontinencia urinaria en los hombres. Al dañar los músculos y los nervios alrededor de la zona pélvica, esta afección causa una pérdida de orina incontrolable e involuntaria.

Flujo urinario escaso

En los casos avanzados de cáncer de próstata, el tumor crece y se hace tan grande que aprieta la uretra, lo que causa la disminución del flujo urinario. Este síntoma también puede ser causado por una hiperplasia prostática benigna, una afección menos grave que ocasiona el aumento del tamaño de la próstata.

Imposibilidad de vaciar la vejiga por completo

Cada vez que orinas, ¿sientes como si la vejiga no se vaciara por completo? Quizás debas consultar con tu médico, dado que este es uno de los síntomas más frecuentes del cáncer de próstata. Esto se debe a que la compresión parcial de la uretra por un tumor impide que la vejiga se vacíe por completo, como ocurre con una manguera de jardín si la pisan.

Flujo urinario interrumpido

Algunas personas con cáncer de próstata descubren que el flujo urinario suele verse interrumpido cuando orinan. Este problema es ocasionado por la compresión de la uretra por parte de un tumor canceroso. No obstante, a menudo, la responsable es una afección menos grave, como la hiperplasia prostática b.

Sangre en la orina

Si detectas sangre en la orina, debes consultar con un médico de inmediato. Podría tratarse de una señal de una infección urinaria, pero también de una afección más grave. Por ejemplo, con el cáncer de próstata, la sangre podría aparecer en la orina si los riñones, los uréteres, la uretra o la vejiga están comprimidos por un tumor canceroso.

Disfunción eréctil

Existen muchas causas diferentes de la disfunción eréctil, y el cáncer de próstata no es siempre la primera que se nos viene a la mente. Sin embargo, de acuerdo con un estudio de 2017, los hombres con disfunción eréctil son 1,27 veces más propensos a padecer cáncer de próstata que el promedio.

Sangre en el semen

La presencia de sangre en el semen no siempre es indicativa de una enfermedad. No obstante, si notas sangre en el semen con frecuencia, consulta con tu médico para asegurarte de no tener cáncer. De acuerdo con estudios llevados a cabo por Mayo Clinic, entre el 4 % y el 6 % de los hombres que tenían sangre en el semen recibieron un diagnóstico de cáncer de próstata. La mayoría de los participantes en estos estudios tenían más de 40 años de edad.

Lumbalgia

Si te has exigido en exceso, es normal experimentar lumbaldia. Pero, si dicho dolor no presenta una causa aparente, esa es otra historia. En un estudio de 2013, los investigadores analizaron, durante 10 años, a hombres que se quejaban de sufrir lumbalgia. Al final del estudio, se descubrió que el cáncer de próstata era aproximadamente un 50 % más frecuente entre ellos que en un grupo de referencia.

Dolor de cadera

En una etapa avanzada, el cáncer de próstata a veces se propaga hacia otras partes del cuerpo, como los huesos de la cadera. Los hombres con cáncer de próstata suelen experimentar un dolor inexplicable en esa parte del cuerpo.

Adelgazamiento inexplicable

¿Recientemente has adelgazado y no sabes por qué? Quizás debas programar una consulta con tu médico. De acuerdo con un metanálisis de 2018, existe una relación entre el adelgazamiento y muchos tipos de cáncer diferentes, entre ellos, el de próstata.

Pérdida del apetito

La pérdida del apetito es un síntoma que se asocia con mayor frecuencia al cáncer, sobre todo, al cáncer de próstata. Las personas que padecen esta enfermedad podrían tener dificultades para tragar los alimentos o sencillamente sentir rechazo por determinados platos.

Clímax doloroso

En ocasiones, la prostatitis, una dolorosa inflamación de la próstata, puede hacer que llegar al clímax sea doloroso. La afección se caracteriza por una sensación de ardor en la zona del perineo y la uretra al eyacular o inmediatamente después de hacerlo. Es ocasiones menos frecuentes, el verdadero responsable es el cáncer de próstata. En este caso, el cáncer ya está avanzado, lo que hace que el tumor sea lo suficientemente grande como para ejercer presión sobre la uretra.

Fatiga

Aproximadamente el 74% de los hombres que padece cáncer de próstata experimenta fatiga en un momento u otro. Les falta energía incluso después de haber tenido una buena noche de descanso. Algunos incluso están tan agotados que tienen dificultades para llevar adelante sus tareas diarias. De acuerdo con una teoría, la fatiga es ocasionada por cambios en el nivel celular que impiden que el cuerpo use la energía de manera apropiada.

Hinchazón en los pies

En una etapa avanzada, se puede hacer metástasis en los ganglios linfáticos ilíacos o aórticos lumbares. Cuando ello ocurre, las venas pueden comprimirse y causar un edema (hinchazón) en los pies y en los tobillos.