ESTADOS UNIDOS. – El expresidente estadounidense y candidato republicano, Donald Trump, informó este domingo que está «a salvo y bien» tras registrarse disparos cerca de su club de golf en Palm Beach, Florida.
Posteriormente, el FBI confirmó que el incidente está siendo investigado como un posible «intento de asesinato». En un comunicado, el FBI indicó que se encuentra investigando el suceso ocurrido en West Palm Beach.
La Policía informó que una persona fue detenida cerca del lugar donde Trump jugaba al golf y se incautó un rifle AK-47 con mira telescópica, que aparentemente iba a ser utilizado para atacar al candidato republicano.
En julio, mientras Trump ofrecía un discurso en un recinto ferial en Butler, Pensilvania, se escucharon disparos. Momentos después, agentes del Servicio Secreto lo protegieron y evacuaron del escenario.
Un periodista de The Washington Post, presente en el evento, reportó que el tiroteo ocurrió diez minutos después de que Trump comenzara su discurso, describiendo gritos y confusión tras una segunda ronda de disparos.
El agresor, identificado como Thomas Matthew Crooks, de 20 años, fue abatido por el Servicio Secreto. El incidente dejó un saldo de dos muertos, incluido el atacante, y otros dos heridos graves.
El FBI señaló que Crooks disparó desde una posición elevada, cercana al escenario, usando un rifle semiautomático estilo AR.
El Servicio Secreto fue criticado por simpatizantes de Trump debido a las fallas en la seguridad que permitieron al atacante acercarse tanto al expresidente. Un análisis reveló que Crooks disparó desde el tejado de una fábrica cercana al evento, a una distancia de menos de 150 metros del escenario.