URUGUAY. – El expresidente uruguayo José Mujica fue internado este viernes en el sanatorio Casmu para someterse a una intervención quirúrgica planificada, en la que se le colocó un stent en el esófago con el objetivo de mejorar su capacidad para ingerir alimentos. Según fuentes médicas, el procedimiento fue exitoso.

Mujica llegó al sanatorio, ubicado en la Avenida 8 de Octubre, durante la mañana, caminando con la ayuda de un bastón y acompañado de su esposa, Lucía Topolansky, exvicepresidenta de la República. La intervención se realizó alrededor de las 14:30 horas y tuvo resultados positivos.

Este sábado, el equipo médico informó que el expresidente «evoluciona dentro de lo esperado», aunque presenta molestias propias del procedimiento, y continúa en recuperación favorable.

El procedimiento

La médica personal de Mujica, Raquel Pannone, explicó que el stent fue necesario debido a una estenosis en el esófago que dificultaba el paso normal de los alimentos. «Realizamos una endoscopía y confirmamos que el orificio estaba tan reducido que no permitía la ingesta. Por eso decidimos colocar un stent, un dispositivo que se autoexpande dentro del esófago, se adhiere a sus paredes y lo mantiene abierto», detalló.

Aunque el procedimiento se llevó a cabo más tarde de lo previsto, se realizó sin complicaciones. Pannone señaló que Mujica experimentó algo de dolor, pero destacó que el stent comenzó a funcionar de inmediato. «Ahora debemos monitorear su expansión completa en las próximas 48 horas», añadió.

El expresidente permanecerá internado durante el fin de semana para asegurar una recuperación adecuada.

Razones de la intervención

El problema fue provocado por una estenosis esofágica que complicaba la ingesta oral, un inconveniente que se suma a su alimentación mediante una gastrostomía. Según Pannone, ambas formas de alimentación son esenciales para mantener el estado general de salud de Mujica, dado que su capacidad de recuperación depende en gran medida de una adecuada nutrición.

La médica destacó que todas las decisiones se toman considerando factores como la edad del expresidente, su estado general de salud y patologías preexistentes. «Nada es menor cuando se trata de su salud», afirmó, subrayando que cualquier intervención conlleva riesgos, pero los beneficios superaron en este caso a los posibles inconvenientes.

Mujica fue diagnosticado a principios de año con cáncer de esófago, condición que lo llevó a someterse a radioterapia. Aunque el tratamiento tuvo efectos positivos, generó complicaciones que afectaron su capacidad para alimentarse normalmente, lo que llevó a la decisión de realizar esta intervención.